El partido comenzó parejo, sin un claro dominador, fue a partir del minuto 10, que Carrasco comenzó a inquietar la valla defendida por Ramiro “huesitos” Lopez, tras dos o tres pelotas cruzadas que complicaban a la espalda del Chacha, los técnicos decidieron dejarse de exquisiteces y resignaron a Homero como enganche para integrarlo a la linea de cuatro volantes. A partir de ahí el H encontró la pelota, de la mano de Gerardo que manejó bien la pelota, hasta que haciendo recordar al viajante Leo Uranga sufrió una lesión muscular. En sustitución de éste, ingresó Pablito Margenat; gracias al valioso aporte del ex Fénix Universitario, el H ahora si logró dominar el medio de la cancha.
Con chispazos de Guzmán Gonzalez y Homero Cholaquikidis, el H logro inquietar el arco rival, y es en los descuentos que tras la combinación de Homero y El zurdo la pelota deriva en un centro que el goleador 2007 de la divisinal B transforma en gol.
Llegamos al descanso con un resultado, que era merecido, por lo hecho en los últimos minutos del primer tiempo.
Para el segundo tiempo el zurdo abandonó la cancha debido a la advertencia del mediocre referí diciendo: “una más y lo echo”, aunque durante el primer tiempo fue el delantero más peligroso, los ténicos de manera acertada decidieron sacarlo para no quedar con 10, ingresando en su lugar el Nacho Suares.
A partir de acá me gustaría terminar mi análisis, y decir simplemente que nos lo dieron vuelta, para no recordar el deplorable segundo tiempo realizado por nuestra querida institución. Pero no lo voy a hacer, mi papel de periodista puede más que los sentimientos.
Para resumir lo sucedido me remito a las palabras de Bora Milutinovic en aquel peñarol de principios de los 90: “CATASTROFA”.
El H perdió la pelota, perdió la marca, perdió la idea, perdió el rumbo y obviamente perdió el partido. Desde el minuto cero se metió en su arco, no presionó, no recuperó la pelote, y el desenlace aunque se tardó era obvio, le dieron vuelta el partido, para peor con dos goles de pelota quieta.
Para despedirme, me gustaría resaltar algunos puntos positivos:
Primero, la figura de la cancha a mi humilde entender, en lo particular, en lo que respecta a mi persona, fue “el Tino” la reciente incorporación del H, que clausuró el sector derecho de la defensa, de no ser porque el juez le cobró un par de manchas, el puntero izquierdo rival nunca lo logró inquietar.
Segundo, el encomiable esfuerzo realizado por nuestro diseñador de alta costura que tuvo como fruto las hermosas indumentarias que el H vistió el domingo próximo pasado.
Y lo último, la reflexión final de los jugadores, pensando lo perdimos nosotros y como todos sabemos, va a ser difícil que se repita un segundo tiempo como este.
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